Librería
Español
Capítulos
Ajuste

Capítulo 2

Fue un gran día para mí, tuve la oportunidad de conocer a Stan Lee, grité como loca y lloré mucho al llegar a casa.

Después de eso, el trabajo comenzó a absorber casi todo mi tiempo y Robert estaba igual, tenía mucho sin poder verlo y vivir al otro extremo del mundo sólo hacía las cosas más difíciles para nosotros.

Al volver a casa creí que la situación mejoraría, esa fue una de las razones por las que decidí regresar a América pero en un año nada ha cambiado. Más bien parece que tenemos más compromisos que antes.

—¿Valentina, estás ahí? — sacudo la cabeza, para salir de mi ensoñación — Dame una señal para saber que no te has quedado tiesa de la emoción. 

—Pues no, pero casi — admito sonriente, llevándome la mano al pecho. Siento que el corazón se me va a salir en cualquier momento. 

—¿Entonces, qué dices?

—¡Por supuesto que me encantaría ir! ¿Cómo te atreves siquiera a dudarlo? 

—Es que debía asegurarme — dice entre risas — Te enviaré los detalles por mensaje más tarde. Te amo, corazón — agrega y ahora de lo que tengo ganas es de llorar. 

—Y yo a ti tonto. Te extraño

—Pronto nos veremos — asegura — Tengo que irme y presiento que tú también, así que al mal paso darle prisa. Te escribiré.

—Adiós — me despido y unos segundos después suena el pitido que da por finalizada la llamada.

Suspiro, negándome a permitir que la nostalgia y el hecho de extrañar tanto a mi hermano me baje el ánimo. Dejo el móvil en la barra y cuando levanto la mirada me encuentro a Ava con los codos apoyados en el mármol, mirándome con una sonrisa enorme. 

—Ustedes son adorables.

Ruedo los ojos, divertida. 

—Solo a la distancia porque cuando estamos juntos Robert se vuelve un dolor en el trasero. 

—Ya, pero no es lo mismo aguantarlo a él que a cualquier otro ser humano en la Tierra. 

—No, es peor — admito — Soportar a Robert implica soportar también su ego más grande que el de Tony Stark. 

Ava se frota el mentón como si pensase en mis palabras y luego se encoge de hombros. 

—Yo sin problemas me sacrificaría. 

Sacudo la cabeza. 

No tiene remedio. Nunca lo tendrá. 

—Además, ahora gracias a ese dolor en el trasero irás a la premiere de una de las películas más esperadas de este año. Eres una maldita suertuda — dijo ella, resoplando. 

—Pero si a ti ni te gustan los superhéroes — protesto indignada, recordando que ese pequeñísimo detalle fue el tema de una discusión entre nosotras en algún momento. 

—Los superhéroes no, pero sí los hombres que los interpretan. 

La miro con incredulidad. 

—¡Ava! Eres papa casada ¿Recuerdas? 

Sacude la mano restándole importancia al asunto, como si no hubiese estado hablando toda la semana de cuanto extraña a su novio. 

—No si se trata de los hombres de Marvel — bromea, recostándose sobre la barra. Un suspiro dramático precede a sus palabras — Lo que yo daría por ver a esos dioses en vivo y a todo color — mira un punto perdido y luego se endereza de golpe, peor que la niña del exorcista. 

Cuando sus ojos azules caen sobre mí comienzo a negar, no sé lo que quiere pero cada vez que me mira de esa forma es señal de que debo huir. 

—No — digo antes de que abra la boca. 

—¡Pero si todavía no he dicho nada!

—No me importa, lo que sea ya puedes ir olvidándolo. 

—Uno, solo concédeme un deseo, Valentina — se levanta y me toma las manos — Vuelve de la Premiere con una cita. 

—¿Estás loca? — me zafo de su agarre — Voy al estreno a acompañar a mi hermano, no a conseguir novio. 

—Eso dijiste la última vez y le pediste matrimonio a Carlos Hemsworth. 

Pongo los ojos en blanco, maldiciendo el día en el que me puse en ridículo frente a todo Marvel.  

—Supéralo, eso fue hace mucho. Además, ni que de verdad lo hubiese hecho con la esperanza de que se volviera realidad. 

—Bueno, lo que sea ¡Por favor! — se arrodilla frente a mí, haciéndome soltar una carcajada por lo pequeñita que se ve gracias a la altura de la silla en la que me encuentro — De mínimo consigue el número de alguien. 

—¿Para qué? — me paso las manos por el cabello, exasperada. 

—Para salir del hoyo de la soltería en el que llevas mucho tiempo metida. 

Me doy la vuelta, aún riendo y vuelvo a negar con la cabeza. 

Las relaciones son complicadas, requieren tiempo y eso es justo lo que ahora no tengo. Así que ¿Para qué involucrarme en algo que se que al final no va a resultar? Mejor me ahorro problemas y dramas y me concentro en lo que de verdad es importante. 

—Anda, terminemos ya que se hace tarde y no puedo saltarme la cita en el salón — digo, volviendo a mirar mi plato — No puedo llegar a la sesión con el cabello como estropajo. 

Ava reniega como niña pequeña pero no vuelve a hablar del tema. 

WHATSAPP (Private Chat)

Teléfono de Valentina

Última vez a las : p.m.

El hermano más guapo del mundo y lo sabes ?

MaryMaryMaryMaryMary_____

La Premiere es este sábado,

en Los Ángeles.

Susan y yo estábamos

pensando que tal vez podrías

llegar el jueves y quedarte todo

el fin de semana. Solo es una

idea, si te acomoda mejor regresar,

está bien por mí. Pero ni creas

que vas a quedarte en un hotel.

Avísame cualquier cosa.

Te amo.

Estaré en Los Ángeles el jueves.

La verdad es que no tenía mucho que pensar. Hace mucho no paso tiempo con mi hermano, extraño a los monstruos que tiene por hijos y me vendría bien un descanso del trabajo.

—Entonces el boleto lo tengo que reservar para el jueves — Ava teclea en su teléfono en tanto me mira de reojo varias veces.  

—¿Qué?

—Nada. 

—Ya suéltalo — muevo los brazos haciendo alusión a mis palabras — Estás mirándome así, como cuando quieres decirme algo pero no lo dices. 

Lo piensa y después de unos minutos, apaga el móvil y cruza los brazos sobre el pecho. 

 —Solo me pone feliz que te tomes unos días para ti — confiesa y yo aparto la mirada, ya sé por donde va esto — Tu hermano tiene razón, trabajas mucho. 

—Lo sé pero esto es necesario, debo trabajar si quiero que esto siga como hasta ahora y eso se duplicará si abrimos las próximas boutiques antes de año nuevo. 

—Bueno, yo solo digo que no todo en la vida es trabajo. 

—Sí para mí — trago saliva con dificultad, sintiendo el enorme nudo en la garganta — El trabajo nos salvo — Ava no dice nada más, conoce la historia y sabe perfectamente porque soy como soy y porque me refugio en esto — A-además no te emociones, no me voy por mucho tiempo. Son solo tres días. 

—¿Debo avisar que no estarás disponible? 

—Llevaré el móvil a todos lados, pero no creo poder atender cosas del trabajo. Robert me mataría, se supone que voy a pasar unos días en familia.

—La oficina se volverá un caos. 

—Para eso te tengo a ti — la abrazo por los hombros — Eres mi arma secreta, confío en que podrás mantener todo bajo control hasta el próximo lunes. 

Ella me mira con desconfianza, pero al final no dice nada y se limita a comenzar con las llamadas.

Tres horas después hemos reagendado cada una de las citas y reuniones que tenía programadas para el viernes, he reservado mi billete de avión y también le avisé a mi querido hermano.

Por fin llegó el tan esperado sábado y hasta ahora me permito sentir nervios.

Al final sí que me he salido con la mía al pasar la noche del jueves y parte del viernes en un hotel. Robert casi me mata, pero ya había hecho la reserva y no le quedó más remedio que aceptarlo para que mi dinero no fuera un gasto innecesario.

Descarga la aplicación ahora para recibir recompensas
Escanea el código QR para descargar la aplicación Hinovel.