Librería
Español
Capítulos
Ajuste

Escape

—¿Qué haces Fernando?—inquiere yasmin con expresión confundida

—Bloqueo las puertas y las ventanas para que él no entre—informo

—Entiendo Fernando, ¿Qué te dijo tu mamá?, ¿Te creyó?—pregunta yasmin

—No me creyó, pero me dijo que vendrá, espero que llegue pronto porque no quiero morir en manos de mi tío—dije con voz trémula

—Yo tampoco, debemos estar alerta siempre Fernando.

—Y estaremos alerta—la cargo y la siento en la cama—escúchame, si uno de nosotros sobrevive, debemos dar aviso a la policía de esto—menciono

—Los dos debemos salir vivos de esto Fernando—añade

—Pero en las películas siempre uno de los personajes muere—opino

—No sé de que hablas—dice yasmin con expresión confundida

—Olvídalo yasmin, pronto oscurecerá y debemos estar muy atentos si mi tío aparece.

—Esta bien Fernando.

Tomo lo necesario y dos cuchillos, le doy a yasmin un cuchillo y me quedo con el otro.

La noche llega y los dos nos sentimos nerviosos y un poco asustados.

—Tranquila yasmin—dije con voz cálida

—No puedo Fernando, tu tío en verdad me da mucho miedo, no creo poder defenderme de él y menos si siento dolor al caminar—confiesa yasmin

Mi teléfono vibra de repente y los dos nos sobresaltamos, saco mi teléfono y contesto la llamada.

—Hermana, ¿Mamá ya viene en camino?—pregunto

—Sí, pero explícame, ¿Qué está pasando?—indaga Paola con tono confundido

—Mi tío tenía escondida una puerta detrás del armario y tenía un candado puesto—informo

—¿Y qué había en el sótano?—inquiere Paola

—Había cosas viejas y había 5 discos alrededor de una televisión con un DVD encima—sigo informando

—¿Y qué contenían los discos?.

—Los dos primeros contenían grabaciones que mi madre hizo con mi amiga yasmin y cuando ella desapareció.

—Pero los tres últimos discos, contenían asesinatos y tortura hechos por nuestro tío—dije con voz trémula

—Eso no puede ser……—espeta Paola

—¿Seguro que las grabaciones no fueron editadas?—inquiere Paola y duda

—No hermana, son reales—asevero

—Ahora entiendo porque nos ocultó la cabaña……—dice Paola con tono triste

—Yo también ahora lo entiendo……—dije con tono triste

—Pero ahora sabes lo que sucedió con tu amiga.

—Sí, ella ahora mismo está conmigo—añado

—¿Cómo que está contigo?, ¿No la mató nuestro tío?—indaga Paola con tono confundido

—No Paola, ella sigue con vida, escúchala—acerco mi teléfono a yasmin.

—Hola Paola—dice yasmin con voz nerviosa, Paola se queda sin palabras.

Acerco mi teléfono a mi oído—Para que me creas y sé que no me creerás, pero nuestro tío está vivo y ahora quiere matarme por saber información que lo puede meter a la cárcel—confieso con voz trémula

—Eso no puede ser posible Fernando, lo vimos morir—dice Paola sin poder creerlo

—Él planeó su muerte Paola.

—¡Lo voy a matar por todo lo que hizo!—espeta Paola

—Hermana, si no llegamos a vivir para contarle a la policía, quiero que tú lo hagas—dije

—No digas eso Fernando, no dejare que él te haga daño, tú solo resiste y quiero que estés alerta—súplica Paola

—Lo haré hermana.

Yasmin y yo escuchamos golpes provocados por un hacha en la puerta, volteamos a ver a esa dirección.

—Hermana, mi tío está aquí—dije con tono asustado

—Ay dios, por favor, cuídate y no me cuelgues hasta que mamá llegue—dice con tono preocupado

—Esta bien.

Volvemos a escuchar como golpean la puerta con el hacha y mi tío logra hacer un hoyo en la puerta.

—Fernando, tengo miedo—confiesa yasmin, empieza a temblar.

Me acerco a ella—Yo te protegeré yasmin, no dejare que te haga daño—dije disimulando mi miedo

Mi tío hace un hoyo más grande y se asoma.

—Sobrino, ya estoy aquí para matarte—se ríe mientras lo dice

—Tío….. —espeto

—¿Me extrañaste?, porque yo si te extrañé mucho—dice con una sonrisa maliciosa

—Hermano, ¿Qué sucede?, ¿Qué dice nuestro tío?—inquiere Paola con tono confundido

—Dijo que ya está aquí para matarme a mí y a yasmin—informo

—¡No puede ser!, llamare a la policía.

—Esta bien, pero rápido—dije con impaciencia

Federico deja de asomarse y continúa rompiendo la puerta con el hacha.

—Fernando, vámonos por favor, no podremos contra él—súplica yasmin

—Yasmin, tranquila, ¿Sí?, debes seguir el camino de las flores blancas que te llevarán hasta donde aterrizará mi jet—informo

—¿No vendrás conmigo?—inquiere yasmin

—No, yo distraeré a mi tío.

—Fernando, por favor no, los dos debemos irnos—continúa suplicando yasmin

—Si los dos nos vamos, nos matará, uno debe quedarse a distraerlo—dije

—Fernando….—la interrumpo.

—Hazlo yasmin, camina todo lo que puedas, pero escapa—me acerco a una de las ventanas que da a la parte trasera de la cabaña y quito la madera, rompo el cristal con mi brazo.

—Fernando, por favor, ven conmigo—ruega yamin

—No puedo yasmin, ¡Debes irte ya!—ordeno

Cargo a yasmin y nos acercamos a la ventana, la saco con mucho cuidado.

—Fernando, cuídate, ¿Sí?—dice yasmin con cariño

—Lo haré, te estaré esperando yasmin, pero vuelve con la policía—dije

—Esta bien—comienza a correr con dificultad por el camino que le dije.

Federico rompe la puerta por completo y rompe la mayoría de la madera que coloqué en la puerta.

Me pongo en guardia e intento controlar mi miedo.

—Así que, preferiste salvar a tu noviecita antes que salvarte tú, sobrino—dice Federico con tono de decepción

—No sabes de lo que te arrepentirás—amenaza Federico

—Yo me arrepiento de haber confiado en ti y considerarte mi mejor amigo—confieso con tono serio

Se ríe de manera maniática—Sin mi amistad, tú hubieras sido un don nadie—escupe Federico

—Hubiera preferido eso a tener un loco como amigo—suelto

—No entiendo porque secuestraste a yasmin, si ella jamás te hizo nada—espeto

—¿Quieres saber por qué?.

—Muy bien, te lo diré, la secuestre porque me dio celos que ella fuera tu amiga cuando puedes tener solo mi amistad—confiesa Federico

Federico rompe la última madera.

—Jamás debiste tener mi amistad de esta manera.

Se acerca—Pero la tuve porque tú jamás sospechaste de mí—dice Federico

Retrocedo—Tío, espera—dije con voz trémula

—Es demasiado tarde para pedirme que espere sobrino—levanta el hacha.

Me arrincona contra la pared y mi tío baja el hacha con fuerza.

Cierro los ojos y le clavo el cuchillo en su costilla.

Federico se detiene y suelta el hacha, se queja de dolor.

Aprovecho y corro a la salida, salgo de la cabaña y me alejo rápidamente.

Federico se saca el cuchillo y lo tira, toma el hacha y corre detrás de mí.

Me adentro en el bosque y busco con la mirada un escondite.

Federico se adentra en el bosque también y me busca con la mirada, deja de correr y empieza a caminar.

—Sal sobrino, que te voy a dar una muerte no tan dolorosa, lo prometo—grita Federico

Encuentro una cueva y me escondo.

—Sobrino, no tienes escapatoria, así que sal, ¡Ya!—continúa gritando con tono molesto

Descarga la aplicación ahora para recibir recompensas
Escanea el código QR para descargar la aplicación Hinovel.