Capítulo 15: La suerte en la desgracia
Desde de que se unió a la empresa, fue la primera vez que Catalina fue reprendida tan fuertemente por Mateo. Después de escuchar las palabras furiosas de su director, Catalina se dio cuenta de lo grave que era el error que había cometido
Ella mantuvo la cabeza baja muy culpable. Era verdad que no estuvo del humor para concentrarse en su trabajo durante estos días. Ahora, disculparse no servía de nada después de haber cometido un error de nivel tan bajo y causado tantas pérdidas a la empresa, por eso ella preguntó:
—Señor Hurtado, ¿hay algo que puedo hacer para remediar el error?
Mateo dio un suspiro impotente, sin tener más ganas de reprocharla, y dijo:
—Ve rápidamente a preparar bien el proyecto final de la planificación y ve conmigo a la Empresa Unidos a explicarles todo esto. Ojalá podamos recuperar esta cooperación con ellos.
—Bueno, voy a hacerlo ahora mismo.
Al escuchar que todavía cabía la posibilidad de remediar el perjuicio causado, Catalina se puso un poco animada e inmediatamente se dio la vuelta con la intención de volver a su escritorio afuera.
Sin embargo, chocó pesadamente contra la puerta que fue empujada desde afuera. La puerta de madera le golpeó directamente en la frente y le provocó un dolor tanto que se quedó un poco mareada.
Resultó que era el asistente de Mateo, Orlando Villa, quien había irrumpido en la oficina precipitadamente. Parecía tener algo muy urgente para informar a su jefe.
—Hombre, ten cuidado, ¡eh! ¿Por qué estás tan precipitado? —Mateo se adelantó y sostuvo a Catalina con el ceño un poco fruncido— Catalina, ¿estás bien?
Orlando se sintió muy culpable y se disculpó:
—Catalina, lo siento mucho, no era mi intención. Tengo algo muy urgente para informarle al señor Hurtado.
Catalina se apresuró a decir:
—Está bien. No me pasa nada. Bueno, voy a buscar el proyecto final primero.
—Catalina, no tengas prisa —Orlando dijo—. Señor Hurtado, según la última noticia, el presidente de la Empresa Unidos fue llamado a la comisaría por la policía. Los tres vicepresidentes y algunos directivos altos también fueron convocados respectivamente por la policía.
—¿Qué dices? ¿Qué ha pasado? —Mateo preguntó asombrado.
—Hace unos días, en un ejercicio militar, el sistema de posicionamiento por radar de no funcionó correctamente, lo resultó que un avión de caza fue disparado accidentalmente por un proyectil y dos pilotos murieron en el acto. Hoy se publicó el informe de investigación y se revelaba que los productos suministrados por la Empresa Unidos al ejército eran de calidad inferior. Por lo tanto, el gobierno ha autorizado a la policía para que investiguen a fondo la Empresa Unidos y todas las empresas que tienen cooperación con ella. Por eso, tenemos mucha suerte sin firmar el contrato con ellos.
Catalina no pudo creerlo y preguntó con dudas:
—Orlando, ¿es todo cierto? Entonces...
Al escuchar las palabras de su asistente, Mateo se quedó sin palabras y miró hacia Catalina con una expresión un poco avergonzada.
El descuido de Catalina en el trabajo inesperadamente ayudó a la empresa a evitar una crisis innecesaria y Mateo se arrepintió de haberla regañado tan fuerte hace un momento.
Catalina notó la vergüenza de su director y tomó la iniciativa de hablar mientras se cubría la frente:
—Señor Hurtado, aunque mi descuido en el trabajo no ha causado pérdida a la empresa e incluso ha dejado a nuestro evitar una crisis, un error siempre es un error. Esta vez solo tengo un poco de suerte. Le prometo que seré más cuidadosa en los detalles y no cometeré más este tipo error en el futuro.
Mateo asintió ligeramente con la cabeza:
—Bien, ya veo. Puedes retirarte ya. ¿Pero estás segura de que tu frente está bien?
—Gracias por su preocupación. Estoy bien.
—Bueno, pues descansa un rato. Si te sientes mal, tienes que ir al hospital, ¿vale?
—Sí, señor.
Catalina salió de la oficina de Mateo. Lo que pasó hoy le dejó un poco cansada, por lo que ahora solo quería terminar lo antes posible el trabajo de hoy y volver a casa para descansar.
En este momento, Catalina todavía no sabía que el escándalo de la Empresa Unidos que iba en viral en las redes sociales tenía algo que ver con Emanuel, su recién casado.
