Capítulo 2
Horas después ya dudaba de su decisión, su madre quedó tan sorprendida que apenas si podía decir algo coherente, su padre sin embargo estaba molesto, creía que su decisión era imprudente, en ese momento ella pensó que era un pesado tradicionalista, pero años después estuvo de acuerdo en que ella había sido una ingenua imprudente, más bien una estúpida cegada por el amor.
- Adeline sé que amas a ese joven, pero sólo tienes 20 años, ¿crees que estás lista para casarte? — preguntó su madre, que era más paciente
- Mamá, tú te casaste casi a la misma edad que yo
- Eran otros tiempos, tú tienes mucho por delante
- Tu madre tiene razón hija, debes pensarlo mejor, apenas conoces a Nick
- Confíen en mí por favor — rogó casi con lágrimas
- Te queremos y nos preocupamos por ti, pero es tu decisión — concluyó su padre
- Gracias, papá — ella corrió para abrazarlo
- Ya, no es el fin del mundo, solo te casarás — respondió el a su abrazo sin saber que en realidad la vida de su querida hija iba a cambiar para siempre
A la semana siguiente conoció a la familia de su prometido, ella siempre supo que él era de una buena familia pero jamás imaginó que pertenecía a una de las familias más poderosas del país, su suegra se vio muy sorprendida al conocerle, al parecer esperaban "algo mejor", no una joven de clase media con poca noción de la realidad en la que vivían los Brown, a pesar de que Nick no era una persona snob, ella siempre notó que él no se mezclaba con la plebe y estando allí entre las personas que eran parte de su élite social ella comprendió que estaba fuera de lugar en esa fiesta
- Estamos contentos de que Nick finalmente haya decidido sentar cabeza — mencionó una mujer elegante que parecía ser su tía
- Tía no hables así, no soy tan viejo, apenas si llegué a los 24
- Tú sabes cómo son las reglas querido — él la miró algo molesto
- ¿Reglas? — preguntó Adeline curiosa
- Nada querida — agregó la mujer
- ¿Ya tienen todo listo para la boda? — preguntó la madre de Nick seriamente
- En dos semanas madre, como prometí — agregó al ver que ella no parecía muy convencida
- Cuánto antes mejor
- Mamá no es el mejor momento
- De acuerdo, ya lo hablaremos en privado — Adeline empezó a sentirse incómoda, algo no estaba bien, pero no quería preguntarle nada porque mucha gente estaba a su alrededor
- ¡Brindemos por el compromiso! — dijo un hombre anciano, el ambiente estaba tenso
- Por Nick y Adeline — agregó finalmente la madre del prometido
Dos semanas después todo estaba listo para la boda, era el día del ensayo final y se había ido temprano al salón de belleza para hacer su tratamiento de novia, su amiga Jenny estaba muy entusiasmada con la idea de ser una dama de honor, ambas habían crecido juntas y desde pequeña soñaban con una boda grande y el vestido blanco
- ¡Adeline no tienes idea de la suerte que tienes!, me acabo de enterar que el abuelo de Nick le dejará gran parte de las acciones de la compañía
- ¿Dónde escuchaste eso?
- Lo leí en las revistas de chismes, al parecer solo están esperando el último suspiro del viejo
- Su familia ya tiene dinero suficiente para comprar media ciudad, supongo que unos millones más no harán mucha diferencia
- No lo entiendes, su abuelo es materno
- ¿Y?... — ella le miró sin entender su punto
- Que no tiene hijos varones, así que Nick es su heredero según la tradición familiar
- Eso es muy anticuado y machista
- Creo que no quiere dejarle su empresa a una mujer, además la madre de Nick no parece interesarse por los negocios
- Es verdad, creo que nunca ha trabajado en su vida — ambas se miraron y rieron al unísono
- Dejemos de hablar de cosas aburridas y cuéntame sobre qué piensas usar en tu noche de bodas
- Hummm, aún no lo sé, mi madre me ha obsequiado algunas prendas
- ¡Tengo que verlas!, ella siempre ha sido muy anticuada
- En su época se usaba de ropa interior lo que hoy está de moda
- ¡No exageres que no es tan vieja!, aunque a veces pienso que sí, me dijo que lo que pasará mañana en la noche es algo natural y que no debo preocuparme de nada, que Nick sabrá que hacer
- Jajajaja, ¿acaso piensa que eres una santa?
- Buenooo ¡no hables como si fuese una zorra!
- ¡Vamos! sabes que estoy bromeando, pero ya sabes que hacer ¿verdad?
- ¡No te burles!, no soy idiota, he visto algunas películas para adultos algunas veces
- Bien, ya sabía yo que no me decepcionarías
- ¿Cuánto tiempo más crees que tendremos que estar en ésta sauna?, siento que me estoy deshidratando
- Esa es la idea — rió Jenny — cuando salgamos de aquí estarás espléndida — agregó
- Eso espero.
Tres horas después estaba ataviada en un vestido de noche color blanco, se miró en el espejo, parecía que ya iría al altar, su suegra había insistido en decidir, sobre todo, ella apenas si había dicho una palabra respecto a la organización de la boda
- ¿Querida estás lista? — dijo su madre al entrar en la habitación vestida como una dama elegantemente
- Mamá ¿Crees que estoy haciendo lo correcto?
- ¿Qué pasa cariño? — la miró preocupada
- No sé si pueda encajar en esta familia mamá, solo mírame ni siquiera puedo reconocerme
- ¿Amas a ese muchacho?
- Creo que sí... lo hago — se corrigió
- Entonces haces lo correcto
- Te amo mamá — respondió al tiempo que la abrazaba
Media hora más tarde todos esperaban a que se presentaran los novios para iniciar el ensayo de la boda, Adeline estaba inquieta sentía que algo andaba mal, no había visto a Nick en todo el día, pero su suegra le había dicho que era normal, que a los hombres no les gustaba estar cerca cuando se hacían los preparativos nupciales, ella le creyó, pero ahora ya estaba preocupada
- ¿Dónde está? — le preguntó a su suegra
- No lo sé, debería haber llegado hace una hora
- Llámalo, debo estar atorado en el tráfico
- Él no fue a trabajar, estaba con unos amigos — ella lo miró estupefacta
- Él me dijo que estaría ocupado con el trabajo y que no me preocupara si no lo veía hoy
- Pues mintió — agregó la mujer sin muchos miramientos — acostúmbrate los hombres mienten todo el tiempo
Adeline pensó que su suegra era una mujer fría, hablaba como si tuviese mucha experiencia al respecto, pero en su voz no se denotaba tristeza.
- Es el ensayo de nuestra boda ¡tiene que venir!
- ¿Qué se supone que haga? — ¿Estaba bromeando con ella?, pensó, pero al ver la tranquilidad con la que ella le respondía decidió hacer algo por su cuenta
Caminaba entre la gente como si fuese un fantasma, buscando esperanzada encontrar a su prometido, las personas la miraban como si estuviese loca, ella trataba de disimular su pánico, pero en los últimos instantes ya se sentía desesperada ¿le habría pasado algo malo?, volvió a la casa de Nick y al entrar en su habitación encontró sobre la mesa una nota, en ese pedazo de papel estaba la respuesta que buscaba, pero en su interior ella sabía que si lo leía el rumbo de su vida iba a cambiar, tomó todo el valor que le quedaba y se acercó para leer el papel
"Adeline
Lo siento, pero no me casaré contigo"
