Capítulo 14: ¿A quién está buscando?
-No es necesario, abuelo, solo es un refriado. Compraré unas pastillas en la farmacia.- Frida le detuvo al instante.
Leonardo la miró seriamente, Frida se puso ansiosa, y se mordió los labios inconscientemente.
-¿Cómo vas a mejor solo con las pastillas? Tienes un tono nasal muy grave.- suspiró Leonardo, y le hizo un gesto para que se acercara.
Frida se acercó un poco y se paró.
-Recuerda comprar la medicina. Si mejoras, no te olvides de ir a la empresa a ver a Simón.-
Frida asintió con la cabeza, -Sí, ya lo sé, abuelo.-
-Vale.- Leonardo estaba satisfecho, y le dijo, -Puedes irte.-
Después de salir de la familia Fleixa, Frida llamó a Sofía, y tardó unos veinte minutos en llegar.
Al subir al coche, Sofía preguntó, -¿Ya lo tienes claro? ¿Quieres abortar el bebé?-
Frida se abrochó el cinturón de seguridad en silencio.
-¿Por qué no hablas?-
Sofía miró a Frida, al verla sentada inexpresiva, frunció el ceño, -¿Qué te pasa? ¿No lo has pensado cuando volviste anoche? ¿Acaso quieres quedarte con el bebé?-
Al escuchar estas palabras, Frida acarició su vientre, -Es un ser humano, ¿no sería demasiado cruel si lo aborto así?-
-¿Qué?¿Estás bromeando? ¿No son crueles tus padres cuando te pidieron que te casaras con un discapacitado en lugar de Liliana? ¿No es cruel que tu ex marido se buscara con su amante y te echara de la casa? Si te quedas con este bebé, la familia Fleixa tampoco podrá aceptarte y si vuelves a la familia Casaus, ¿crees que tus padres te aceptarán?-
Las palabras de Sofía hicieron a Frida entrar en razón.
-Escúchame, aborta el bebé, ahora la familia Fleixa es lo único que tienes. Además, este bebé es de origen desconocido, ¿quién sabe qué virtud tendrá en el futuro?-
Dicho esto, Sofía tomó una decisión por Frida.
-Como tu mejor amiga, sólo puedo decir esto, piénsalo bien.-
Frida recordó lo que Simón le dijo anoche, aunque dijo que le daba tres días, no iba a ser así.
Entonces...... ¿Va a abortar al bebé?
Si quería quedarse en la familia Fleixa.
Si le echaran de la familia Fleixa, la familia Casaus tampoco la aceptaría.
Pensando en ello, Frida cerró los ojos con disgusto, -Vámonos.-
-¿Lo has decidido? Entonces te llevaré al hospital.- Sofía cambió de dirección mientras hablaba, -Si este niño es de alguien a quien quieres, no me opondré a que lo tengas, pero es de un extraño. No sabemos si será una bendición o una maldición si nos lo quedamos, la mejor solución es abortarlo.-
Las dos se callaron en el resto del trayecto.
Frida estaba muy deprimida cuando estaban haciendo la cola. Sofía la acompañaba y la consolaba.
Finalmente cuando llegó su turno, el médico frunció el ceño después de hacerle la revisión.
-Señorita Frida , según el examen médico, la pared interna de su útero es muy delgada. El aborto podría provocar una perforación de la pared y una hemorragia interno. No le recomiendo que haga esto.-
Al oír esto, Frida frunció su ceño, Sofía también estaba sorprendida, -¿No puede abortar?-
-No, no es recomendable.- el doctor suspiró y dijo, -Piénsalo bien, una hemorragia interna no es una cosa pequeña. Vuelve y piénsalo.-
Al salir del hospital, Sofía estaba muy preocupada, -No se puede abortar, ¿qué vas a hacer? ¡Dios mío, cómo puede haber una cosa tan molesta!-
-No lo sé.-
-Te llevaré a casa-
Frida asintió con la cabeza y luego se negó.
-No, tengo que ir a la empresa, llévame a la empresa.-
Sofía no habló más, la llevó a la empresa y cuando vio el edificio del Grupo Fleixa, no pudo evitar suspirar, -Pensé que nuestra familia era ya bastante rica, no pensé que el Grupo Fleixa lo era más.-
-Sofía, gracias por todo.-
Sofía la despidió, -Vete, llamaré a otros médicos para preguntar.-
Las recepcionistas tenían impresión de Frida porque la última vez que vino fue llevado por el vicepresidente Fleixa. Por eso, hoy le trataron con una buena actitud.
Frida subió al ascensor y llegó a la oficina del presidente que estaba en el último piso.
Caminó con pasos ligeros, y vio que la puerta de la oficina no estaba cerrada. Quiso entrar.
-La última vez que te pedí que buscaras a una persona, me trajiste a esa mujer, y esta vez me trajiste una madre. Rafael, ¿soy demasiado bueno contigo, o ahora no piensas cuando haces las cosas?-
Simón estaba sentado frente a la oficina, estaba golpeando el escritorio y parecía que estaba de mal humor.
Rafael estaba escuchando el sermón con la cabeza gacha.
Al ver esto, Frida se escondió inconscientemente detrás de la puerta.
Simón estaba muy enfadado ahora, si entraba ahora, seguro que lo tomaría con ella. Será mejor que se espere.
-Señor Simón, no hice a propósito, es que me has dado muy poca información. Así que prefiero coger todo que perderme algo.- Rafael también estaba agraviado, había trabajado durante tanto tiempo para Simón por cosas del trabajo. Aunque fueran asuntos difíciles, podía lidiar con ellos.
Pero esta vez la tarea era buscar a una mujer, encima una mujer de la que no sabía nada.
Era muy difícil buscar a una mujer embarazada en el hospital.
-¿Poca información? ¿No sabes recopilar informaciones por ti mismo?- Simón se burlaba y su mirada se volvió sombría, -¿O es que me estás culpando?-
El tono frío hizo que Rafael se enderezara, e inmediatamente negó con la cabeza.
-¡No! Señor Simón, voy a mandar a más personales para investigarlo. La próxima vez la interrogaré personalmente y te lo traeré.-
-¿Interrogar?-
-No se preocupe, si fuera esa persona, no le haré daño.-
-Vete.- al obtener una respuesta satisfactoria, Simón tiró impacientemente de su corbata y dejó a Rafael marcharse.
Rafael se marchó de inmediatamente, no quería quedarse ni un segundo más.
-¡Sí!-
Cuando Rafael salió, vio a Frida parada en la esquina.
Se miraron mutuamente y cuando Frida estaba a punto de hablar, Rafael la arrastró a la esquina.
-¿Estás loca? ¿Cómo te atreves a escuchar nuestra conversación?-
Al oír esto, Frida movió su cabeza, -Acabo de llegar, pero ¿a quién está buscando?-
Las personas tenían curiosidad.
Además, Frida era su esposa, e instintivamente quiso saber cosas de él.
Al escucharlo, Rafael entrecerró sus ojos, - Señorita Frida, le aconsejo que no pregunte lo que no debe, solo eres una sustituta. No eres de verdad su esposa, si sigues entremetiéndote en lo que no debes, cuidado que no podrá seguir siendo la esposa de Señor Simón.-
