Librería
Español
Capítulos
Ajuste

Capítulo 2 - La cruda realidad de la vida

Ni bien se graduó del colegió ingresó a trabajar en diferentes empleos de tiempo completo, posteriormente hubo una vacante en la pastelería local y consiguió un puesto para elaborar los dulces, a partir de allí su vida había tomado una nueva dirección, tenía un propósito, le había tomado el gusto a trabajar en repostería y a pesar de que no tenía estudios al respecto, creía que verdaderamente podría hacerlo el resto de su vida, armar su propio negocio era un sueño que le parecía muy lejano, pero un sueño es algo lejano hasta que uno trabaja duro y lo alcanza, o al menos eso era lo que decía su madre, se había propuesto tantas cosas, y había muerto tan joven, lo lograría por ella, lucharía y alcanzaría sus metas aunque tuviese que sacrificar a algunos años de su juventud para lograrlo.

En el Valle de las flores los días eran muy tranquilos, en un pueblo pequeño cualquier cambio de look era una gran novedad, de cierta forma le gustaba esa monotonía, conocía a sus vecinos y ellos le apoyaban cuando había necesidad, era un hogar, y ella había sido feliz allí a pesar de la pobreza, sus mejores amigos habían crecido, estudiado y casado allí, ella tenía otros planes, trabajó arduamente durante 5 años para saldar su deuda y ahorrar algo de dinero para su futuro, quería arriesgarse e ir en busca de su sueño. Su amiga Daisy decía que estaba perdiendo los mejores años de su vida, pero ella no lo comprendía, cuando Rossalyn horneaba sentía que volvía a ser una niña, esos recuerdos eran todo lo que le quedaban de su madre, y ella quería conservarlos para siempre.

Todos conocían su historia, y le habían dado una mano cuando sus días se volvieron oscuros tras la muerte de su madre, ella había aprendido a sobrevivir, pero también a valorar a las personas, conocía sus rostros, nombres y sus tentempiés favoritos, se sentía parte de una gran familia allí, por eso le dolía que tuviera que abandonarlos pronto, quería volver algún día siendo una mujer profesional y abrir la mejor repostería del pueblo, dar trabajo a su gente, finalmente darse la oportunidad de amar, tener una familia, hijos con quién hablar de la hermosa persona que la crió y le enseñó todo lo que sabía, necesitaba partir por un bien mayor, si se quedaba nunca podría ahorrar lo suficiente para abrir su propio negocio, hasta su jefe el señor Beckett, le había dado su bendición cuando le contó sobre sus planes, le dijo que debía confiar en sí misma y en su talento, que las cosas saldrían bien y que siguiera su propio camino dondequiera que este la llevara.

Con el tiempo el dolor por la pérdida de su madre fue menguando, pero seguía sintiendo un vacío que nunca podría llenar, así que hacía todo lo posible para mantenerse ocupada con distintas actividades, pasaba sus días horneando en la pastelería y los fines de semana ayudaba en un albergue parroquial, su jefe era un hombre de buen corazón que siempre le daba los excedentes producidos del día para que ella se los diera a los necesitados, con su colaboradora más fiel y amiga Yasmine Sullivan, que por cierto era la hija del único doctor del pueblo, siempre estaban organizando eventos para ayudar a las familias que se veían afectadas económicamente por pérdida de trabajo o desastres naturales, haciendo de buenas samaritanas ellas sentían que sus vidas tenían un propósito, viviendo en un pueblo tan pequeño a veces sentían que se estaban perdiendo del mundo, desde pequeñas soñaban con viajar y conocer lugares que veían en la televisión, muchas veces fueron el soporte la una de la otra, especialmente cuando ella quedó sola en el mundo, la familia Sullivan la había acogido, en su hogar y apoyado cuando ella decidió que ya era hora de emprender su propio camino y ser independiente, Yasmine era la hermana que ella nunca tuvo y la persona a quién más extrañaría cuando finalmente se marchara.

Al llegar a sus 22 años Rossalyn había perdido mucho, pero también debido a su infancia difícil había ganado mucha fortaleza, su carácter se había vuelto tenaz y valiente, solía ser comparada con la fuerza incontrolable de la naturaleza, ella misma solía pensar que sería capaz de sobrevivir a cualquier cosa, sin saber que al decir esto que tarde o temprano tendría que comprobar sus propias palabras.

Descarga la aplicación ahora para recibir recompensas
Escanea el código QR para descargar la aplicación Hinovel.