Capitulo 3
Liliana no perdió tiempo y la envolvió en un abrazo. Ver sufrir a su amiga era como si le estuviesen haciendo daño a ella misma. Ella siempre había sido fuerte, pero Aldana era más sensible emocionalmente.
- Ok ok... no empieces a moquear. Ya le encontraremos solución a ésto. Averigua dónde hay que ir a hablar con esos miserables abogados y jueces les diré que estás en mi casa y que éres como una hermana para mí, peor sería estar viviendo debajo de un puente. Que no me vengan con toda esa mierda de leyes y no se cuantas porquerías más, lo importante es que tú y Dhari están bien.- Exclamó Lily cada vez más enojada.
- No lo sé... Debería hablarlo con Fabrizio, quizá lo convenza de que abandone esa idea de llevarse a Dhari, tiene que respetar la decisión de la niña también.- Soltó Aldana.
-Eres demasiado compasiva amiga. Debería existir un brebaje de maldad para darte de beber a ti. Vamos a su casa y rompamosle su bonito automóvil, si él está lo golpeamos, entramos a su casa y también golpeamos a su novia la quinceañera.-
-No por dios como puedes pensarlo siquiera...- Exclamó Aldana casi horrorizada pero conteniéndose de soltar una carcajada.
-Definitivamente naciste en el país de las inocentes Aldi.- Soltó Lily pasando una mano por su alborotado cabello.-Está bien, no me voy a entrometer, pero más le vale que no se meta con mi pequeña Dhari porque soy capaz de destriparlo con un cuchillo de plástico.-
- Trataré de convencerlo sin usar la violencia.-
-Que aburrida eres...- Soltó Lily tomando aire, tratando de relajarse.- Si quieres resolver ésto pacíficamente, qué te parece si salimos a beber algo cuando vuelvan los chicos?- Preguntó con entusiasmo.
-Beber a las tres de la tarde? De ninguna manera y menos frente a los niños.- Soltó Aldana.
- Yo digo beber y automáticamente piensas que hablo de alcohol. Con ése pensamiento no conseguirás ni un novio como dios manda.-
- No quiero uno. Me estoy divorciando, porqué querría un novio?- Pregunto Aldana sorprendida por el comentario.
-Pués un viejo con dinero no te vendría nada mal, así solucionarías el problema ese que tienes con tu ex esposo...- Exclamó Lily divirtiendose por la cara horrorizada de su amiga.- Oh vamos, solo bromeo. Que aburrida eres...-
-Ya llegué...- Se hizo escuchar Dhari desde la entrada. Y ambas fueron a recibirla haciéndose seña de que nada dirían con respecto a lo de su padre.
-Dónde está Will?- Preguntó Lily.
-Yo que sé. No le gusta que lo vean a mi lado y menos con lo que pasó hoy.- Soltó Dhari con un tono aburrido.
-No digas nada aún... Deja tus cosas aquí y salgamos a beber y en el camino nos cuentas...- Se apresuro Lily a tomar su bolso.
-Yo no bebo alcohol Lily.- Soltó Dhari ganándose una mirada reprobadora.
-No te puedes negar que eres hija de tu madre.- Dijo Lily- No entiendo porqué creen que hablo de alcohol cuando digo beber?-
Mientras caminaban las tres, sintiendo el aire de un otoño que mas bien parecía primaveral, llegaron a un paseo que quedaba a algunas calles de su casa. Allí había una cafetería y muchos comercios. Era un lugar típico de encuentros, ya sea para pasear o comprar. Ahí mismo se sentaron a disfrutar de una extensa charla de mujeres que se extendía desde el color de vestido que usaría Dhari en su graduación hasta la cucaracha que había matado Lily en su trabajo. Las conversaciones entre Aldana y Lily eran una cosa imperdible y a Dhari le encantaba. Si bien adoraba la manera de ser de su madre, llegó a adoptar muchas cosas de Lily, como la manera de decidir las cosas libremente. O decir lo que pensaba sin remordimientos.
-Qué pasó con Will que no vino contigo?- Preguntó Lily con curiosidad.
-Es un idiota. Ví que se iba con sus amigos luego de esperarlo casi media hora fuera del colegio.- Soltó Dhari con furia.- Su ex novia, o lo que sea que haya sido, me advirtió que me alejara de él. Al parecer alguien nos vió saliendo de casa juntos y le fueron con el chisme.-
-Oh ésto me está gustando... Porqué no le dicen a todo el mundo que viven juntos, así morirá de rabia esa chica. No me imagino la clase de mujer que le gusta a Will, es un chico tan reservado que ni siquiera sabía que tenía novia. Dhari es tu oportunidad de conquistarlo.- Soltó Lily dejando de lado el entusiasmo cuando la joven casi escupe su batido.
-Por dios ni aunque me pagaras millones de dolares lo haría. Es un imbécil, y él tampoco me soporta. Así que el rechazo es mutuo.-
-Deberías mejorar tu relación con Will hija, no es un mal chico, tiene sus cualidades y su carácter así como tú tienes lo tuyo. Comprende que no todos somos iguales...- Resaltó Aldana.
-Aldi, deberías ser mano derecha del cura...- Estalló Lily a carcajadas junto con Dhari, mientras Aldana meneaba la cabeza comprendiendo que ni su hija ni su amiga tenían remedio.
Pensó Aldana mirando a Lily.
