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2

Hablar por teléfono con Brooke hizo que el tiempo hasta la escuela pasara volando. Ya en la puerta de la escuela, mi abuela me entregó una carpeta diciendo que tendría que ir a la secretaria a entregarla y recoger mi horario. Las puertas de la escuela estaban hechas de dos columnas de ladrillo rojizo que sostenían un gran arco que presentaba el nombre de la escuela -TOM SNAIL- en letras blancas resaltadas en acero negro.

    

Había muchos autos que estaban entrando a la escuela, pasamos por un camino con un largo campo de hierba a nuestra izquierda y tres grandes edificios en forma de -L- a nuestra derecha pero aún no habíamos llegado al edificio principal. Realmente llegamos al edificio después de pasar por una plaza redonda con una hermosa fuente donde al otro lado de la plaza se podía ver un enorme gimnasio y frente a la fuente había unas escaleras que daban acceso a un gran edificio alargado que por mi deducción debe haber sido la principal.

    

Después de despedirme de la abuela Zora entré al edificio sin dejar de mirar las cosas a mi alrededor. Y no era de extrañar lo grande que era la escuela por dentro, las escaleras por dentro eran de madera oscura al igual que los marcos de puertas y ventanas, el centro del edificio estaba abierto y se podía ver el parapeto de los otros pisos, la escuela más allá. el interior estaba en un tono marrón similar a los detalles de madera y las paredes estaban decoradas con marcos de madera blanca dejando un contraste muy bonito, además, el piso tenía bandas de madera clara y oscura que le daban al edificio un aspecto antiguo.

    

Los alumnos paseaban por los pasillos con sus grupitos y como no conocía a nadie con quien parar a hablar, me fui directamente a la secretaría como me había dicho la abuela Zora. Mientras miraba alrededor pude notar más de la escuela desde adentro, las escaleras estaban moldeadas con finos detalles de acero negro y los pasamanos eran de madera pulida.

    

No mentiré si digo que no tardé mucho en encontrar la oficina, caminé dos pisos hasta encontrar la oficina en el piso de donde había venido. Al principio una chica me atendió y me dijo que esperara que el director estaría hablando conmigo en unos minutos y como el arreglo no pasó más de minutos y ya estaba entrando a la oficina del director.

-Señorita alborotadores. Siéntese por favor.

Me senté y le entregué los documentos. La directora era una señora mayor, vestía un vestido con rayas rosas y naranjas, su cabello era blanco y estaba recogido en un moño con un lápiz.

-Soy la directora Janne Snail y les doy la bienvenida en nombre de Tom Snail College. Tu uniforme está en tu casillero. — Me pasó una hoja y la dejé — Toda la información que necesitas está aquí. Teddy te acompañará en un recorrido por la escuela.

Salí de la habitación después de agradecer al director y fui tras este Teddy. Me alistaba después de terminar el recorrido ya que según el periódico mi clase estaba en minutos. No quería preguntarle a nadie si conocían a algún Teddy, así que me quedé al frente de la sala de juntas hasta que una chica sonriente con trenzas cruzadas cruzó el pasillo y se detuvo frente a la puerta en la que estaba apoyada.

- Permiso. ¿Has visto algún Roxana Hottes por aquí? La miré por encima de un par de estantes, o más bien su uniforme, era lindo pero no algo que Brooke usaría, así que sonreí de inmediato.

-¿Eres Teddy Belie?- - dije un poco sorprendida de que fuera una niña pero con una sonrisa en mi rostro.

— ¿Nombre Unix? Sí, yo también me confundí con el tuyo. Vamos, te mostraré la escuela.

Teddy me mostró la escuela y era realmente grande. Teddy era muy extrovertida pero no parecía tener muchos amigos aquí en la escuela, siempre miraba hacia abajo y evitaba el contacto visual con las personas.

— Todavía quedan minutos, creo que será mejor que vayas a vestirte. Te quedaste en el mismo bloque que yo, debemos tener varias clases juntos.

Teddy fue muy agradable y amable y sabía que se convertiría en una gran amiga. Asentí antes de dirigirme a mi casillero. Abrí mi armario y noté que había unos paquetes sellados, tomé uno que estaba encima y fui al baño a vestirme. Recibí el paquete que tenía escrito -Uniforme estándar-. Tenía una falda de uniforme a cuadros estándar con un fondo marrón, una camisa de vestir de manga larga y una chaqueta marrón más oscura con un broche con el escudo de la escuela que era una concha de caracol en el pecho izquierdo

    

Me vestí como recordaba que se vistió Teddy, camisa, falda, blazer y eso fue todo. Además de todo lo que llevo puesto, también tengo un abrigo de algodón abotonado, una corbata con el mismo estampado y lo que parece una capa de algodón, una camiseta sin mangas con cuello de pico. Puse el abrigo y la corbata dentro de mi mochila y después de dejar mi ropa en el armario, agarré mi maletín y me fui directo a la sala. Mientras caminaba por los pasillos, noté que los uniformes de las niñas de la escuela eran los mismos, pero algunas ponían su estilo en el uniforme a través de accesorios, algunas con cinturones coloridos, calcetines divertidos, sombreros o incluso abrigos elegantes.

    

Cuando llegué a mi primera clase Teddy ya estaba ahí, sentado en una de las primeras filas esperándome, el salón era un gran anfiteatro y con una pizarra enorme que servía de pantalla para el proyector adosado al techo, tendríamos literatura. Al contrario de lo que pensaba, la clase pasó volando, antes del descanso tendría matemáticas y lamentablemente Teddy no estaría conmigo. Siempre he sido malo en ciencias exactas, pero siempre tuve a Helena para ayudarme y ahora que estaba perdido, seguramente conseguiré algo este semestre.

    

Yo estaba en la sala cuando entró el profesor, parecía uno de esos profesores estrictos. Apenas entró y comenzó a escribir la tarea en la pizarra. Incluso traté de prestar atención, pero incluso la respiración de una hormiga era más interesante. Hablaba y hablaba, todavía no entendía nada. A los pocos minutos de pasar el material se fue y en ese momento un chico alto de cabello azul se sentó a mi lado.

- No eres de aquí. Eso no sonó como una pregunta para mí, sonaba como si estuviera afirmando. Me miró profundamente a los ojos, lo que me hizo mirar hacia otro lado a veces demasiado avergonzado.

- No...

-No durará ni dos días-.

No entendí muy bien. ¿Me estaba amenazando o advirtiendo? Fue todo lo que tuve que pasar. Por eso esa parte quedó en manos de Brooke, que tenía mucha más experiencia. El timbre sonó unos minutos más tarde, pero se sintió como una eternidad. Fui a la cafetería que según Teddy era para encontrarla allí.

La gente de esa escuela tenía personalidad, y bastante marcada para ser exactos. De camino a la cafetería vi un pequeño grupo justo en el centro, había gente rodeada de otras que estaban de pie observándolos. Las chicas abusaron del escote incluso con uniforme, y aunque sus faldas eran del mismo tamaño que las demás, parecían ser más sensuales que las demás.

  

Desde la distancia vi a Teddy sentada junto a una de las ventanas del piso, ella se sentó en la última mesa libre de la cafetería. Recientemente me había sentido menos hambriento, así que tomé una pequeña botella de jugo de naranja de una de las máquinas antes de ir a encontrarme con Teddy. La gente en el comedor estaba en pequeños grupos ordenados, algunos con accesorios pesados, algunos con batas de laboratorio y algunos con revistas y cámaras. En otras palabras, la escuela se separó en grupos y popularidad como todas las demás.

- Demorado. ¿Se perdió? -Tal vez un poco en mis pensamientos, pero eso no viene al caso.

-No solo me distrae con otras cosas. - dije mientras me sentaba abriendo mi jugo.

Teddy me miró como si quisiera que dijera más, pero comencé a beber mi jugo como si no hubiera dicho nada. Mientras comía con Teddy me sentí vigilada, algunas personas a nuestro alrededor me miraron y lo disimularon. Sé que no era muy popular porque no me gustaba llamar la atención pero tampoco llegué al punto de ser invisible.

-Todo el mundo te está mirando. ¿Es esto normal donde sueles ir?

A veces la gente te mira por dos razones, pero yo no vestía mal para ser tratado como un extraño pero tampoco tenía la personalidad de una persona popular o segura de sí misma. En la sociedad en la que vivimos, ya sea que llames la atención por tu apariencia o personalidad, si eres una persona normal y corriente, ciertamente eres invisible para los demás. Esto me hizo un poco feliz, tal vez pensaron que me veía bonita porque no le había dicho una palabra a nadie, o tal vez pensaron que era muy rara.

- No mucho. Era normal cuando caminaba con mi hermana.

-Me identifico contigo, ¿sabes? Parezco ser extrovertido, pero es muy difícil para mí encajar con alguien. Pero creo que contigo es diferente, tal vez podamos ser buenos amigos.

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